Todos en mayor o menor medida usamos la tecnología diariamente, sin saber sus intrincados orígenes y mucho menos sus límites.
La revolución tecnológica no para... la tenemos en casa con los electrodomésticos, en la recreación, en la cartera o bolsillo (celulares, Ipods, etc.), en el trabajo, en la universidad, en el colegio... suma y sigue.
Ciertamente, somos usuarios de muchas herramientas tecnológicas, en el quehacer cotidiano y profesional, que aparentemente nos facilitan el trabajo en términos de eficiencia y eficacia; sin embargo, no nos damos tiempo de pensar en qué hemos ido perdiendo y hacia dónde nos lleva este acelerado avance tecnológico.
Nuestros niños, y también muchos adultos, se pasan horas frente a un PC "comunicándose" con sus pares, conocidos y desconocidos a nivel internacional. ¿Exponiendo su vida íntima y la de su familia? o ¿Ampliando su círculo de amistades?
En este blog queremos hacer una reflexión socio-cultural del uso y abuso de la tecnología en los distintos ámbitos del quehacer regional y sus implicancias a nivel de relaciones sociales y profesionales directas.
